El documento describe las enseñanzas bíblicas sobre la naturaleza de Dios. Explica que Dios es un espíritu invisible que no puede ser confinado a ningún lugar físico ni representado por imágenes. Solo a través de Jesucristo podemos conocer a Dios. El documento también advierte sobre el uso de expresiones antropomórficas para describir a Dios y recomienda leer la Biblia para entender y practicar estas verdades.