El documento resume la situación económica de Bolivia en 2013 y principios de 2014. En 2013, la economía boliviana creció a una tasa histórica del 6,8% impulsada por el sector de hidrocarburos y la demanda interna. Aunque hubo superávit fiscal y de cuenta corriente, se espera una desaceleración del crecimiento al 5,5% en 2014 debido a un aumento proyectado en las importaciones. El Banco Central implementó políticas monetarias contractivas para reducir la liquidez y controlar la inflación.