El documento habla sobre la importancia de examinar el corazón y dejar que el Espíritu Santo lo sane y lo dirija. Explica que el corazón humano no es confiable y que debemos confiar en el Espíritu Santo. También describe las características de un corazón que sigue al Espíritu Santo, como dejarse instruir por la Palabra de Dios y no vivir esclavizados por el miedo o los deseos carnales.