El Foro Romano era la zona central de la antigua ciudad de Roma donde se desarrollaban actividades comerciales, religiosas, administrativas y judiciales. Originalmente era un terreno pantanoso que fue drenado por los Tarquinios. A lo largo de los años, los sedimentos de las colinas circundantes fueron elevando el nivel del suelo. El pavimento de travertino que aún puede verse data del reinado de César Augusto.