La Tierra se formó hace aproximadamente 4,500 millones de años a partir de una nebulosa primitiva. Los choques entre partículas en la nebulosa dieron lugar a la formación del Sol y los planetas. La Tierra experimentó una diferenciación química temprana que dio lugar a la formación de un núcleo de hierro y níquel en el centro, un manto intermedio y una delgada corteza externa. Esta estructura en capas se debe a que elementos más pesados se hundieron hacia el centro bajo la graved