El graffiti en México se originó en Tijuana influenciado por el estilo chicano de Estados Unidos. Se ha popularizado en ciudades como la Ciudad de México y Nezahualcóyotl, donde grupos como Neza Arte Nel combinan el graffiti con la tradición muralista. El graffiti es una forma de expresión artística callejera pero también conlleva riesgos legales debido a que a menudo es ilegal. La policía no siempre distingue entre graffiteros con permiso y aquellos que rayonean ilegalmente