El documento explora la importancia de la marca como una impresión mental formada a través de experiencias, más que simplemente por la repetición de productos y mensajes. Se aborda cómo la conectividad con los clientes se ha vuelto más compleja y cómo los mercadotecnistas deben adaptarse para destacar en un entorno de sobrecomunicación. También se presentan estrategias algorítmicas para la creación y el posicionamiento de marcas, enfatizando la necesidad de una conexión auténtica con los consumidores.