Los robots han evolucionado de máquinas automatizadas simples a sistemas complejos capaces de realizar tareas físicas y cognitivas. Originalmente desarrollados para trabajos peligrosos, repetitivos o difíciles, los robots industriales modernos están impulsados por la inteligencia artificial y pueden fabricar una variedad de productos. En el futuro, los robots microscópicos podrían usarse para aplicaciones médicas, mientras que la inteligencia artificial mejorada permitirá a los robots realizar tareas de planificación y diagnóstico.