Este documento discute la identidad de Castilla-La Mancha. Explica que la identidad regional se ha construido en oposición a "el otro" y se ha centrado en el discurso del agua. También analiza la etnogénesis de Castilla-La Mancha y cómo se ha desarrollado una identidad regional distinta a través de la ordenación de recursos, la asignación de nuevos valores y la potenciación de símbolos regionales como la bandera y el lema "Agua".