Este documento discute la teoría humanista de Marx y su aplicación a un nuevo modelo de producción socialista. Propone que la educación Marxista puede ser una alternativa para abordar los problemas sociales al entenderla como una lucha de clases permanente para transformar la realidad económica y social. Argumenta que el Proyecto Educativo Integral Comunitario y la pedagogía Marxista pueden usarse para preparar a las personas para la lucha y el trabajo hacia el progreso del socialismo.