La conducta sexual humana se basa en procesos psicológicos y fisiológicos complejos. Los trastornos de la conducta sexual incluyen desviaciones de las normas de las relaciones sexuales que son socialmente inaceptables. El diagnóstico y tratamiento de parafilias y otras desviaciones sexuales se realiza mediante terapia cognitivo-conductual y otras estrategias psicológicas, aunque los resultados no siempre son exitosos debido a la falta de motivación para cambiar.