El estudio investiga la relación entre el gasto en alimentación y la productividad laboral en Chile, argumentando que una alimentación óptima puede incrementar la productividad y generar efectos positivos en el crecimiento del PIB, el empleo y la recaudación fiscal. Se propone un nuevo indicador, el 'gasto efectivo', que mide el impacto real del gasto en alimentación sobre la productividad y concluye que un aumento del 1% en el gasto óptimo en alimentación puede resultar en un incremento del 0.3% en el PIB en cinco años. Se sugiere la necesidad de formalizar el gasto en alimentación como un beneficio que contribuya directamente a la salud y productividad de los trabajadores.