Una red en modo infraestructura es una red de tipo cliente-servidor, donde los clientes suelen ser ordenadores personales que se conectan a un punto de acceso. Una red Ad-Hoc consiste en un grupo de ordenadores que se comunican directamente entre sí de forma punto a punto. Para configurar una red Ad-Hoc, se debe seleccionar el modo Ad-Hoc en la tarjeta de red, e introducir el mismo nombre de grupo de trabajo en ambos ordenadores a través del asistente de configuración de red.