El Internet de las Cosas (IoT) interconecta objetos físicos a Internet usando sistemas embebidos que permiten la conectividad y programación remota. Aunque el IoT aún no se ha implementado ampliamente en hogares, ya está presente en industrias donde maquinaria, infraestructura, medición ambiental y salud usan estos objetos conectados. Se espera que el IoT se expanda pronto a más sectores como transporte y energía, así como al mercado de consumo en hogares.