Porfirio Díaz gobernó México por casi 30 años entre 1876 y 1911, en un período conocido como el Porfiriato. Aunque inicialmente prohibió la reelección, modificó la constitución para permitir su permanencia en el poder. Su largo mandato se caracterizó por el desarrollo económico pero la represión de opositores. Finalmente fue derrocado por la Revolución Mexicana liderada por Francisco Madero en 1911.