El documento aborda la necesidad de repensar la identidad digital, la firma electrónica y los sistemas de interoperabilidad desde una perspectiva tecnológica, organizativa y semántica. Se identifican diagnósticos sobre la falta de coordinación y la necesidad de priorizar proyectos en la administración local, así como la importancia de adaptar los servicios y procesos. Se proponen estrategias como la reingeniería de servicios y la colaboración con administraciones líderes y expertos para mejorar la interoperabilidad.