El tren maglev utiliza levitación magnética para avanzar a velocidades de hasta 550 km/h, utilizando superconductores de alta temperatura crítica como el BSCCO 2223. La brecha entre el vehículo y el riel es de 15 cm, lo que permite que el tren 'vuele' sobre los rieles. Este sistema de transporte se encuentra en operación en países como Alemania, Japón y China.