Manuela Cañizares fue una patriota ecuatoriana que se destacó por su valentía y amor a la patria. Su casa se convirtió en el lugar de reuniones clandestinas donde los quiteños planearon los primeros movimientos contra las autoridades españolas, culminando en el Primer Grito de la Independencia el 10 de agosto de 1809. Su casa, conocida como Casa de Las Tres Manuelas, rinde homenaje a ella y otras dos patriotas ecuatorianas.