El documento anima a los miembros de la Orden Franciscana Seglar y de la JuFra a vivir de acuerdo con el llamamiento de Dios, imitando el ejemplo de San Francisco de Asís en oración, amor fraterno y servicio a los demás. También les pide que usen la creatividad para transmitir el mensaje de Dios en el mundo moderno, derribando barreras entre personas y anunciando el Evangelio incluso a los ricos, de la misma forma que hizo San Francisco.