Este documento explora el dilema entre la legalidad y la legitimidad a través de varios ejemplos históricos como Antígona y la Revolución Estadounidense. También discute las posibles fuentes de legitimidad como el poder, la costumbre, la voluntad del pueblo y la religión. Finalmente, concluye que no hay una clara distinción entre la legalidad y la legitimidad, sino más bien una zona gris donde ambas se entremezclan.