Este documento trata sobre tres metales: zinc, cobalto y aluminio. Para el zinc, describe intoxicaciones medicinales y una enfermedad llamada "fiebre de los fundidores" que afecta a trabajadores que funden zinc. Para el cobalto, indica que se encuentra naturalmente en la corteza terrestre y se usa en aleaciones resistentes al desgaste. Finalmente, para el aluminio explica que es estable al aire pero se disuelve en soluciones alcalinas y puede reaccionar explosivamente con agua cuando está fundido.