El documento analiza las diferencias entre preguntas convergentes y divergentes, destacando que las primeras buscan respuestas únicas y limitadas, mientras que las segundas fomentan la creatividad y el análisis crítico. Las preguntas convergentes son fáciles de codificar y analizar, pero limitan las respuestas, mientras que las divergentes invitan a un intercambio de opiniones y requieren un mayor nivel de razonamiento. Se sugiere que las preguntas divergentes representan el futuro de la educación al estimular el pensamiento crítico y la resolución de problemas.