El documento describe la evolución de los ordenadores a través de tres generaciones, desde los primeros ordenadores de bulbos que usaban tarjetas perforadas hasta los portátiles modernos. Los primeros ordenadores almacenaban datos girando un tambor magnético, mientras que la segunda generación usó redes de núcleos magnéticos. En las últimas seis décadas, los ordenadores han pasado de medir 3 metros a ser portátiles de 20 centímetros.