El Instituto Geográfico Nacional confirmó que hubo una relación directa entre los aproximadamente 400 terremotos registrados en septiembre del año pasado cerca del Proyecto Castor, un almacén submarino de gas natural frente a las costas de Castellón, y la inyección de gas en este depósito, indicando que la sismicidad inducida fue el resultado de la actividad de inyección de gas.