El programa de pares, iniciado en 2006, busca mejorar la atención a personas con VIH y sida en hospitales mediante la educación entre iguales y el empoderamiento de los pacientes. Este enfoque integral abarca desde la promoción de la salud hasta la mejora de la adherencia al tratamiento, facilitando la comunicación y reduciendo el estigma asociado a la enfermedad. En 2012, se atendió a 1,229 personas, llevando a cabo más de 1,300 intervenciones con un equipo de educadores formados para apoyar a los pacientes.