Este documento describe los factores protectores de la familia que previenen conductas de riesgo en los niños. Identifica fuertes vínculos familiares, padres involucrados que conocen las actividades de sus hijos, y normas familiares claras como factores protectores clave. También destaca la importancia de que los padres tengan una actitud preventiva hacia el consumo de drogas y alcohol. Una familia que cultiva estos factores protectores puede ayudar a prevenir que sus hijos adopten conductas de riesgo.