Los programas establecen la secuencia de actividades y el tiempo requerido para alcanzar los objetivos de una organización, sirviendo como herramienta de control. Los procedimientos determinan el orden lógico para realizar actividades rutinarias de manera eficiente. Tanto los programas como los procedimientos son importantes para orientar a los trabajadores, identificar responsabilidades, evitar duplicidad de esfuerzos y lograr los objetivos de una organización de manera ordenada.