El documento habla sobre los tratamientos térmicos aplicados a materiales como el acero y la fundición para mejorar sus propiedades mecánicas como la dureza y resistencia. Estos tratamientos incluyen calentar y enfriar los metales bajo condiciones controladas. También explica que los lingotes metálicos deben ser trabajados en caliente para darles forma antes de ser usados en la manufactura, aunque la mayoría de metales ferrosos se terminan trabajando en frío.