Durante el gobierno de Gabino Cué en Oaxaca, la deuda pública se triplicó, pasando de 5,970 millones a 14,534 millones de pesos. A pesar del aumento, se alegó que el estado no está en quiebra y la deuda se utilizó principalmente para enfrentar desastres naturales y obras de infraestructura. Al final de su mandato, se espera que la deuda sea administrada por Alejandro Murat con proyecciones de reducción en los próximos años.