Los sistemas de numeración, como el binario, octal, decimal y hexadecimal, utilizan diferentes conjuntos de símbolos para representar números. Cada símbolo tiene un valor posicional determinado por potencias de la base del sistema. Por ejemplo, en binario la base es 2, en octal es 8, en decimal es 10 y en hexadecimal es 16. Estos sistemas permiten codificar eficientemente cantidades numéricas para su procesamiento por computadoras.