El documento describe cuatro categorías principales de software de aplicaciones: aplicaciones de negocios, utilerías, personales y entretenimiento. Incluye subcategorías como aplicaciones de ofimática, profesionales generales, utilidades y domésticas. Explica que el software de aplicaciones se ha desarrollado para realizar casi cualquier tarea y ofrece ejemplos como editores de texto, hojas de cálculo, contabilidad, recursos humanos y juegos.