La meteorización descompone las rocas debido a agentes atmosféricos como la gelivación, termoclasticidad y bioclasticidad. Los agentes geológicos como el viento, glaciares, ríos y aguas subterráneas modelan el relieve a través de la erosión, transporte y sedimentación de rocas. Este proceso forma características del paisaje como valles en U, deltas y cavernas kársticas.