La teoría estructuralista aportó una metodología para analizar organizaciones sociales como el estado, la iglesia y sindicatos, clasificándolas por tipos y elementos de control. Sus orígenes incluyen la oposición entre lo tradicional y las relaciones humanas, y pretender sintetizar teorías clásicas formales. Max Weber fue su principal exponente, aportando los conceptos de burocracia, clasificación de autoridad en legal, carismática y tradicional, y modelo de burocracia.