Este capítulo introduce el tema de guiar como Jesús, argumentando que el mundo necesita un modelo diferente de liderazgo centrado en el servicio. Explica que guiar como Jesús implica un proceso de transformación personal y adoptar su modelo de liderazgo enfocado en otros por encima de uno mismo. Finalmente, resume que guiar como Jesús involucra desarrollar las cuatro áreas del liderazgo: corazón, cabeza, manos y hábitos.