La confesión es una prueba en la que una de las partes rinde declaración ante el juzgador sobre hechos personales que son desfavorables para sus intereses. Existen diferentes tipos de confesión como la judicial, extrajudicial, espontánea y ficta o rendida en rebeldía. La ley establece que el juez puede ordenar la comparecencia de las partes para interrogarlas y que la parte está obligada a responder personalmente el interrogatorio, de lo contrario podrá ser tenida por confesa en la sentencia.