La ingestión de cáusticos puede causar quemaduras graves en la boca, esófago y estómago. Los síntomas no son predictores confiables de la gravedad de la lesión. La endoscopia es importante para evaluar la extensión de la lesión. El tratamiento depende de la clasificación de la quemadura y puede incluir antibióticos, esteroides y dilataciones. Las complicaciones graves incluyen estenosis e perforaciones que pueden requerir cirugía.