Cuento yaz
- 2. Érase una vez un niño que cambió de casa y al llegar a su nueva habitación vió que estaba llena de juguetes, cuentos, libros, lápices... todos perfectamente ordenados.
- 3. Ese día jugó todo lo que quiso, pero se acostó sin haberlos recogido.
- 4. Misteriosamente, a la mañana siguiente todos los juguetes aparecieron ordenados y en sus sitios correspondientes. Estaba seguro de que nadie había entrado en su habitación, aunque el niño no le dio importancia.
- 5. Y ocurrió lo mismo ese día y al otro, pero al cuarto día, cuando se disponía a tomar el primer juguete, éste saltó y dijo "¡No quiero jugar contigo!". El niño creía estar alucinado, pero pasó lo mismo con cada juguete que intentó tocar
- 6. Siempre nos dejas muy lejos de nuestro sitio especial, que es donde estamos más cómodos ¿Sabes lo difícil que es para los libros subir a lugar, o para los lápices saltar al bote? Hasta que finalmente uno de los juguetes, un viejo osito de peluche, dijo: "¿Por qué te sorprende que no queramos jugar contigo?
- 7. El niño recordó lo cómodo que era estar en su camita, y lo incómodo que había estado una vez que se quedó dormido en una silla. ¡Y no tienes ni idea de lo incómodo y frío que es el suelo! No jugaremos contigo hasta que prometas dejarnos en nuestras casitas antes de dormir"
- 8. Entonces se dio cuenta de lo mal que había tratado a sus amigos los juguetes, así que les pidió perdón y desde aquel día siempre acostó a sus juguetes en sus sitios favoritos antes de dormir.