El documento describe las juntas de gobierno que se formaron en América del Sur tras la invasión napoleónica a España y la renuncia de los monarcas españoles. Abascal, virrey del Perú, se opuso firmemente a estas juntas y lanzó varias campañas militares para derrotarlas, incluyendo las juntas de Quito, Nueva Granada, Caracas, Chile y el Alto Perú. La única junta que logró mantenerse fue la de Buenos Aires en 1810, aunque Abascal también se opuso a