El documento define la agitación psicomotriz como un aumento significativo de la actividad motora acompañado de alteraciones emocionales. Puede ser causada por trastornos psiquiátricos o somáticos. Su tratamiento incluye medidas no farmacológicas como la comunicación con el paciente, y farmacológicas como benzodiacepinas y neurolépticos. Los pacientes agitados suelen requerir derivación al hospital para su evaluación y manejo.