Ambas marcas, AMD e Intel, fabrican procesadores de gran calidad actualmente. Sin embargo, AMD es una mejor opción para la mayoría de usuarios debido a su mejor relación calidad-precio, siendo sus procesadores significativamente más baratos que los de Intel pero sólo un 10% menos potentes. Para tareas que usan múltiples núcleos como edición de video, AMD es incluso más potente. Intel sólo es recomendable para usuarios profesionales que requieran el máximo rendimiento monohilo o para gamers acérrimos.