El documento habla sobre las actividades del Asilo San Luis en 1920. Destaca la generosidad de dos benefactoras, la señora Felicia Dorrego del Solar y la señora Inés Dorrego de Unzué, quienes ayudaron al asilo a superar la crisis de los últimos cinco años. También menciona la inauguración de la iglesia de Victoria, donde Monseñor Dr. Agustín Piaggio bendijo la iglesia y la casa parroquial. Resalta la gran contribución de la señora Enriqueta Lezica de Dorrego