El documento aborda las metas internacionales de seguridad del paciente, enfatizando la importancia de la higiene de manos como medida clave para prevenir infecciones en entornos de atención médica. Resalta la necesidad de mejorar el cumplimiento de prácticas de higiene y el impacto del uso de dispositivos como teléfonos celulares y estetoscopios, que pueden contribuir a la contaminación de gérmenes. Se sugiere la implementación de estrategias de monitoreo y educación para fomentar una cultura de higiene en las instituciones de salud.