Este informe documenta las violaciones a los derechos humanos en el Sahara Occidental en 2007. En particular, destaca la prohibición de la asamblea constitutiva de CODESA y el acoso a sus miembros, incluyendo arrestos arbitrarios, tortura, despidos y prohibiciones de viajar. También documenta la represión de manifestaciones pacíficas y la prohibición de asociaciones y sindicatos independientes saharauis, violando los derechos políticos y civiles de la población saharaui.