El documento habla sobre los peligros de la apostasía en los movimientos pentecostales y carismáticos modernos. Critica que estos movimientos enfatizan más en las manifestaciones sobrenaturales que en la soberanía de Dios y la Biblia. También sugiere que han incorporado elementos del ocultismo como hablar en lenguas y movimientos corporales violentos. Advierte que estas prácticas pueden conducir al engaño según las profecías bíblicas.