La música chacha chá surgió en Cuba en los años 1950 de fusiones de ritmos como el danzón y el son montuno. Fue creada por el violinista cubano Enrique Jorrín como una variación más bailable del danzón. Se extendió rápidamente por su ritmo pegajoso y facilidad para bailarlo. En la actualidad, el chacha chá sigue siendo un baile latino popular apreciado en eventos de salsa y bailes de salón.