La radiactividad es un proceso natural por el cual los núcleos pesados se descomponen en núcleos más ligeros y partículas, liberando grandes cantidades de energía. Existen diferentes tipos de radiación con distintos niveles de penetración y peligrosidad. La exposición a la radiación puede dañar los tejidos dependiendo de la dosis, tiempo y tipo de radiación, aunque también tiene usos beneficiosos como esterilización médica o detección de enfermedades.