La autora describe su cosmovisión basada en sus creencias cristianas. Cree en un Dios supremo que creó el universo y envió a Jesús a salvar a la humanidad del pecado. Considera que la sociedad se ha corrompido y alejado de Dios. Su objetivo es ayudar a otros a encontrar la paz mental y acercarse a Dios a través de su estudio de psicología. Se guía por los Diez Mandamientos y valora la salud y el cuidado del cuerpo como un templo del espíritu.