Cuento Carlin y sus dedos magicos

Carlín y sus dedos mágicos

El orgullo y la arrogancia, sólo dejan pérdidas y disgustos.

Carlín y sus dedos magícos

Hace mucho tiempo en un pueblo no muy légano había un niño
bueno llamado Carlín era un niño que tenía un talento mágico
en sus dedos tocaba una guitarra con facilidad la cual llenaba
de felicidad el corazón de cada persona cuando escuchaba sus
hermosas melodías.

El niño Carlín soñaba con ser artista y tener una guitarra. Sus
padres eran pobres y no tenían dinero para cómprale una.
Aunque sus padres

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sabían lo que su hijo quería, hicieron todo lo posible por obsequiarle una, pero no podían y eso les rompía el corazón.
El niño cada vez que iba a la escuela, de regreso, desde lejos
observaba una guitarra que vendían en una tienda musical.
El admiraba la guitarra hasta que un día
-el dueño le pregunta y le dice ¿Tanto te gusta esa guitarra?
- y él responde con una sonrisa. Si me gusta mucho quisiera tener
una pero, no puedo mis padres son pobres y yo no tengo dinero
para comprarla.

Al señor se le ocurre decirle
- si tocas una melodía que a mi oído le agrade te la dejo tocar todos
los días aquí en mi tienda.
Entonces el niño se sienta en un banquito cerca de la ventana y la
mira fijamente y la comienza a tocar como si fuera lo más preciado
que ha tenido hasta ahora, sus dedos mágicamente comienzan a
entonar melodías hermosas como si hubiera tocado por mucho
tiempo y que llegaron mas allá del oído del vendedor, si no que
tocaron su corazón y lo llenaron de alegría.

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El señor muy emocionado le dice: si tú quieres puedes tocar desde
mañana en mi tienda para que alegres el día a mis clientes.
El niño ahora toca todos los días en la tienda de guitarras. Hasta
que un buen día pasa un abuelo cerca del lugar observa al niño y le
dice:
-te gusta mucho tocar la guitarra lo haces tan bien que hasta mi
corazón, mi alma y mi mente llegan a conectarse al momento que
escucho tus hermosas melodías, son un deleite para mis oídos.
- el niño responde – con un gracias señor.
Y el anciano le dice:
- que te parece si te regalo una guitarra así ya no tendrás que venir
todos los días ha esta tienda; tocarías donde sea, donde tú quieras,
en cualquier parte del mundo.

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- solo lo que tienes que hacer, es tocarla siempre con mucho amor
verdadero, sincero y no por interés.
El niño le dice siempre lo hago porque me gusta mucho. El anciano
saca una guitarra y le entrega al niño y desaparece como por arte
de magia. Y escucha una voz diciendo recuerda tocaras siempre
con amor con, amor Carlín.
El niño queda un poco asustado, pero al ver la guitarra se le olvida
de lo que paso.
Desde entonces el niño toca la guitarra en cualquier lugar en cualquier momento. La gente siempre estaba contenta con las melodías de Carlín. El pueblo brincaba de alegría.

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En una tarde cuando el niño tocaba la guitarra para una niña que le
gustaba mucho.
Llega un Rey al pueblo entonces queda asombrado al oír tan
hermosa melodía y dice:
-quien es el que toca tan bella música, que hace que mi corazón se
deslumbre de alegría.
A lo que los guardias le dicen:
-tes aquel niño el que está en aquella orilla del rio.
Entonces el rey se acerca al niño y le dice quieres venir conmigo al
reino a tocar para mí. El niño responde:
-zque no quería conocer otro lugar porque le gustaba donde
estaba y que no le interesa.
Pasan los años y el niño crece y se vuelve joven pero con el mismo
talento que alegraba a la gente.
En ese tiempo el Rey vuelve a insistir y le ofrece:
-que lo convertiría en un príncipe si aceptaría irse con el a su reino
y ofrece muchas cosas como oro por el pago de su servicio y una
vida cómoda con lujos.

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A lo que el de tanta insistencia acepta ir al lugar que tanto le decía
el Rey y que tenía curiosidad, llevando su guitarra y nada más.
Al llegar al reino al joven Carlín quedo impresionado de tanta
belleza, lo atendían como a un príncipe con todas las comodidades
que le ofrecieron, siempre y cuando toque la mejor música para el
Rey.

Al verse rodeado de gente que solo le importaba sus intereses y no
se preocupaban sinceramente de la gente pobre del reino, con el
pasar de los días Carlín se volvió un vanidoso, que solo le interesaba
el dinero y ya no otra cosa.
Pero lo que cambiaria era la forma de tocar la guitarra ya no lo hacía
con el mismo amor con lo que lo hacía cuando estaba en el pueblo.
Al pasar esto al rey ya no le llenaba el corazón la música de Carlín,
ya no le gustaban sus melodías y le dijo:
- Carlín ya no tocas como antes –si no cambias de melodías que me
hagan sentir bien y contenten mi corazón lastimosamente te vas de
mi reino.

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El joven carlín intentaba cada dia una y otra vez volver a tocar como
antes pero le era imposible se preguntaba a si mismo que es lo que
le estaba pasando
-y recordó la voz del anciano que le había dicho:
-recuerda siempre toca con amor Carlín.
El se dio cuenta que ya no había un verdadero amor por lo que
hacía, sino que su corazón estaba interesado por otras cosas como
el dinero y la codicia por la gente que lo rodeaba en el reino.
El joven Carlín decidió volver al pueblo. Ahí intento tocar de nuevo
su guitarra, de pronto volvieron a sonar sus hermosas melodías que
le nacían del corazón.
El pueblo se puso muy contento festejaron y bailaron por el regreso
de Carlín y desde entonces le tocaba todas las mañanas una bella
melodía a la niña que le justaba mucho cuando era niño y así logro
conquistarla pues a ella también le gustaba. El regalo una flor le
confesó su amor y fueron muy felices por siempre.

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Carlín y sus dedos mágicos

Autor: Mauricio J. Melendres Rivas

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