El documento explora la relación entre el cine y la enseñanza de las ciencias, destacando que, a menudo, el cine presenta una imagen distorsionada de la ciencia y del papel del científico, promoviendo estereotipos negativos. Se discuten las ventajas y desventajas del uso de cine de ficción y documentales en el aula, subrayando que, aunque el cine de ficción puede captar el interés de los alumnos, a menudo no se alinea con el currículo. Se concluye que realizar vídeos didácticos con alumnos es una experiencia enriquecedora que fomenta el aprendizaje práctico y apoya la formación de vocaciones científicas.