Este documento resume los resultados de un estudio estadístico sobre los grados de alcohol en la sangre de 300 conductores que tuvieron accidentes automovilísticos. El promedio de grados de alcohol fue de 0.549° y la mediana fue de 0.545°. El autor concluye que es una mala idea conducir bajo la influencia del alcohol debido al alto riesgo que representa para el conductor y para los demás. Al comparar sus resultados con los de otra persona, encontró que ambas muestras mostraban altos índices de grados de alcohol en la sangre